La nueva Ley Agraria, aprobada en segunda votación por el Congreso de la República, prioriza la agricultura familiar y fomenta la formalización del pequeño productor, fortaleciendo de manera competitiva, justa y sostenible el agro de la costa, sierra y selva del Perú.
El presidente del Comité de Agroindustrias, Alimentos y Bebidas de la Asociación de Exportadores (ADEX), Mario Salazar Vergaray, destacó que la norma permitirá incrementar las exportaciones de alimentos, ampliar la generación de empleo y diversificar la canasta agroexportadora nacional.
“Se trata de una apuesta ganadora para el país. Esta ley consolida lo alcanzado y sienta bases firmes para el futuro del agro peruano”, afirmó.
Incentivos tributarios y formalización
La ley establece exoneración del Impuesto a la Renta (IR) a los pequeños agricultores con ventas menores a 30 UIT (S/160,500), y fija un IR de 1.5% para quienes superen ese monto hasta las 30 UIT (S/302,500). Estas medidas apuntan a un marco tributario más justo, incentivando la formalización y la inversión en el sector.
El “milagro agroexportador”
Salazar recordó que el sector agroexportador peruano pasó de exportar US$ 643 millones en el 2000 a US$ 12,349 millones en 2024, creciendo 19 veces en dos décadas, con una tasa promedio anual de 13.1%.
En el 2000, solo el espárrago superaba los US$100 millones en ventas; hoy, arándanos, uvas, paltas y café superan los US$1,000 millones cada uno. Además, productos como el pimiento piquillo, tara en polvo, limón Tahití y harina de maca se perfilan como las próximas estrellas de la agroexportación peruana.
Empleo y aporte fiscal
En 2024, el agro generó más de 2.1 millones de empleos entre directos, indirectos e inducidos, consolidándose como un sector con gran capacidad de reducir desempleo y pobreza. Asimismo, entre 2005 y 2024, la contribución del sector al Impuesto a la Renta de tercera categoría se multiplicó por 5.8 veces, y con esta nueva ley se espera un mayor ingreso fiscal.